Ideal Matte, Estée Lauder

En una entrada anterior os hablaba de una de mis bases favoritas, y en esta, os voy a hablar de otra. Ésta no es que sea una de mis favoritas, es que es LA favorita. Para mí es la base perfecta, es la Ideal Matte de Estée Lauder. Trabajando con marcas de lo que llaman gama alta, una de mis compañeras me la recomendó. Ella me comentó que utilizaba la Double Wear, pero que a mí, por mi tipo de piel, me recomendaba la otra, y os tengo que reconocer que acertó de pleno. EL, en su web (aquí), nos habla de una base ligera e increíblemente suave, que deja un acabado natural y mate, sin aceites y no acnegénico y, como viene siendo ya normal en ciertas marcas, que ya era horas, por cierto, un Factor de Protección solar 8.

• Textura: Mousse que, al aplicarla, se transforma en polvo. En un principio yo era reacia a probarla porque pensaba que me iba a dejar la cara con exceso de grasa, pero no es así.
•  Acabado/Cobertura: Como os comentaba antes, aunque sea una base en mousse, como se convierte en polvo, no deja una piel grasa, ni cremosa, ni aspecto mojado, sino mate, como empolvado, pero muy natural. Citando a Ned Flanders, cuando llevo la Ideal Matte, es como si no llevara nada, en el buen sentido. Es mucho más ligera que otras bases que, aunque nos den un acabado natural, notamos que llevamos la plasta encima. Su cobertura es media, no llega a ser, por ejemplo, ni la Colorstay ni la Fix Fluid, pero bueno, para eso están los correctores.

• Duración: Os cuento desde mi experiencia. Me sorprendió muchísimo porque, sin ser una base de larga duración, yo me la he puesto para salir de noche a las 9 y me ha aguantado hasta las 7 de la mañana, en pleno verano. Lo de siempre, cada cierto tiempo, matificando brillitos que nos puedan salir .
• Precio: Después de hablaros maravillas, ahora viene uno de los contras, es una base bastante cara, de 35 a 40 euros. Yo la compré más barata por el descuento de la perfumería donde la compré y por el vale que me mandaron de cumpleaños.
• Pros: Deja un acabado muy natural. Nos deja la piel mate pero sin resecarla. No mancha. Fácil de aplicar. Tiene protección solar. Me dura horas y horas, incluso en días de poniente. No da la sensación de llevar un kilo de pintura en la cara, quizá debido a su textura. Aunque el envase parezca un poco chapucero, no desperdicias productos, será por su textura. No caduca y doy fe, la tengo dos años y sigue igual, porque la tengo como oro en paño y la utilizo para ocasiones especiales.
• Contras: Además del precio, que me parece muy alto, os soy sincera, yo la compré en su momento porque podía permitírmelo y tenía un descuento. Hoy, no creo que la comprara. Otro contra es la poca variedad de tonos, sólo hay 6. Yo, por suerte, encontré tono, y os aseguro que me va perfecto (y si no, preguntadle a Icetea, ;)), se funde perfectamente con mi piel, pero Icetea la quería pero no hay tono para ella, y gastarse 80 euros en dos bases para mezclarlas, como que no...

Valoración total: 4 de 5. Es una base perfecta, sí, pero debido a su precio y su poca variedad de tonos hace que no esté al alcance de cualquiera. Eso sí, si podéis permitíroslo y acertáis con vuestro tono, os la recomiendo.